Hay obligaciones difíciles de eludir, las deudas son unas de ellas. Los pagos y gastos pendientes pueden quitarte el sueño a tal punto de enfermarte.
Desafortunadamente no todas las personas tienen acceso a una educación financiera para entender que existen diferentes formas de resolver sus asuntos económicos y no llegar al extremo de enfermarse.
En algunas ocasiones las personas no logran siquiera conciliar el sueño o enfocarse en sus actividades, las deudas pueden atormentar tanto que difícilmente hay concentración en el día a día. Ganar poco y deber mucho puede convertirse en un problema de nunca acabar, y esto puede ocurrirle a una persona que viva sola como también a una que viva con su pareja.
También puedes ver: Comprar vivienda: ¿Es una buena inversión?
Cuando no se realiza una estimación de los gastos y cuentas por pagar, el dinero devengado se vuelve el mal llamado “Dinero de bolsillo”. Cualquiera puede ser víctima de las deudas, son las personas quienes escogen endeudarse y no analizar las consecuencias para el futuro. Cabe resaltar que entre más se debe, más intereses se pagan a tal punto de tirar la toalla y entrar en desesperación.
Existen deudas tan aterradoras que se prefieren obviar, el gran problema es que estas siempre pasan cuenta de cobro y aún peor, siempre será más dinero por pagar que el valor inicial. Aunque hemos hablado de lo perturbador que puede ser tener deudas, existen soluciones para todos los casos. Te contamos más al respecto:
Deudas con personas naturales: Cuando nos referimos a persona natural, podemos estar hablando de un amigo, compañero o familiar. Deberle dinero a una persona cercana podría considerarse como algo normal. Hay momentos donde accedemos a préstamos pequeños para pagar otras deudas. Si crees que no puedes cumplir con esta obligación por pagar otras, lo recomendable es acudir a la persona que te ayudó cuando lo necesitaste, pedir un plazo más podría contar como una solución por el momento.
Deudas de servicios públicos: Aunque estas deudas sean difíciles de evadir, el consejo es presupuestar un dinero mensual para su pago. Los servicios públicos son gastos de vital importancia y entran en la lista de necesidades básicas del hogar.
Deudas con bancos y/o entidades financieras: Seguramente estas son las deudas más aterradoras. Las tasas de interés, los honorarios de los abogados en caso de no pagar a tiempo y los reportes en centrales de riesgo, son unas de las tantas consecuencias de no pagar las obligaciones con bancos o entidades financieras.
Existe un modo de no trasnochar por las deudas, si crees que te encuentras en apuros y no puedes pagar tu próxima cuota o vas muy atrasado con los pagos, lo más conveniente es llegar a una refinanciación.
Generalmente, los bancos suelen hacer estos acuerdos para que el deudor no se vea afectado en el pago de sus deudas. Debes tener claro que si haces el pacto, no podrás volver a incurrir en las obligaciones, de ser así, la entidad podría cobrarte sanciones más severas y hasta deshacer la refinanciación.
Desvelarse por deudas puede evitarse, solamente debes examinar todas las posibilidades con las que cuentas y tomar acciones que faciliten el pago de las mismas. Luego de pasar por todo el proceso, medita sobre qué estrategias financieras tendrás de ahora en adelante para no endeudarte o pagar demás.
Los libros, artículos y publicaciones financieras pueden servir al momento de plantear dichas estrategias. ¡Haz el ejercicio!